jueves, 26 de junio de 2014

#wedding #happiness #friends



El día que conocí a María le dije a Carlitos: "Tío, no la cagues!!"  "Verdad que es maravillosa?" (obviamente no dijo eso, yo lo traduzco no vaya a leerlo su madre en algún momento y descubra demasiado pronto el desastre de yerno que se ha echado). Y apenas dos años después, vamos de bodorrio... pero bodorrio, bodorrio!! con su cura (lo más cañón del personal, todo hay que decirlo) su iglesia preciosa, su autobús de invitados... (SU AUTOBÚS DE INVITADOS!!!!! NEVER AGAIN!!!!), y una preciosa casa rural con cena al aire libre. Yo me lo pasé que te  mueres.


De hecho, dediqué más tiempo a esta boda que a la mía propia (así salió... si es que... lo que mal empieza mal acaba) y estaba tan orgullosa como la madre del novio. Porque a Carlitos le he criado a mis pechos profesionales. Lo tuve de becario, cuando le maltratábamos psicológicamente porque creíamos que era el enchufado de un impresentable. Luego fue ayudante del programa que yo subdirigía. Y cuando aprobó su oposición (como dios manda) y le hicieron mezclador, me lo encasquetaron en "No Disparen al Pianista" así, sin desvirgar, porque sabían que mi amor por él aguantaría su aprendizaje sin queja alguna, así como él aguantaría mis gritos como parte de mi encanto personal. Conmigo hizo su primera gala en directo, con ese inconmensurable Jon Cobra invitándonos a probar sus testículos en prime-time, y la Igarti haciendo gala de temple vasco acariciando la carita del basilisco "tranquilo, cariño!"...

A lo tonto, le llevo tratando prácticamente la mitad de su vida. Le he visto crecer (sobre todo su abdomen), comprarse una casa, sentar la cabeza y encontrar el amor de su vida. Y ahora mismo está disfrutando de nuestro regalo. Lo sabemos porque día sí, día no publica fotos para darnos envidia, básicamente enseñando sus pies con el mar al fondo.






Enhorabuena! Más a ti que a María, todo hay que decirlo. Os deseo lo mejor durante mucho mucho tiempo. Y... NO LA CAGUES, CARLITOS!!!!